Ante el problemón que es la epidemia de “influenza por virus porcino”, hay algo que en mi opinión ayuda mucho a la situación del país y que a mí me reconforta, y es ver que SÍ hay presidente, es ver que SÍ hay capitán en el barco.
Me da gusto que Felipe Calderón sí le dé seriedad y trato digno a la institución presidencial, lejos de todo autoritarismo y de toda frivolidad. Por eso considero que la reacción del gobierno federal ante la emergencia ha sido correcta.
Mi familia es de Tabasco y recuerdo muy bien que durante la crisis de las inundaciones en mi estado y en Chiapas en 2007, Calderón mostró autoridad para coordinar perfectamente a los integrantes de su equipo, visitó decenas de veces las zonas afectadas, recorrió a pie albergues y entregó despensas o cobijas, con lo que su presencia movía a la gente a sacar lo mejor de ella en medio del desastre.
Creo que eso es algo que se logra únicamente si se saber ser líder. Y ahora lo hace de nuevo...
Me llama la atención cómo los mexicanos al llamado presidencial respondemos, a pesar de todas las diferencias o inconformidades que podamos tener como sociedad, con total sentido solidario, de unidad y también con nuestro humor característico... Leo en redes de Internet y en la prensa: “Lo siento, no te puedo besar ni abrazar, porque te puedo influenzar”... “Hay que prohibir las asambleas del PRD, porque ahí siempre alguien la hace de tos”.... ”Ya salió M Force contra la influenza… no es para el que no puede vivir, sino para el que quiere vivir más”....
No hay comentarios:
Publicar un comentario